Recientemente, los responsables del Café Ruiz (c/Calle Ruiz 11) se han visto obligados a echar el cierre de su local. Éste lleva sirviendo de lugar de reunión y charla para numerosos intelectuales y ávidos lectores por más de cuarenta años.
Los cafés literarios son cada vez más escasos con el paso del tiempo. En los setenta los también llamados cafés de tertulia eran la moda y plagaban Malasaña siguiendo el modelo de los negocios anteriores a la dictadura que concentraban a personalidades muy destacables en el ámbito cultural (escritores, directores de cine, …) en el centro de Madrid cuando eran más aficionados que autores para debatir y tomar algo.
Ahora tan solo nos quedan dos vestigios (que apenas han sufrido modificaciones) de este modelo de negocio tan popular hace casi cincuenta años en las calles cercanas a la Plaza 2 de Mayo: el Manuela (c/ S. Vicente Ferrer) y el Ajenjo (c/ Galería de Robles). También hay muchos que han sufrido un proceso de renovación estética y conceptual.
Y esto, según los empleados, será lo que ocurrirá con el Café Ruiz. Suponen que tras un breve parón, lo más probable es que se conserve el nombre del local pero el modelo parece agotado y todavía no hay nada claro respecto a su futuro. Los cafés literarios han llegado a su deterioro porque, para los trabajadores del Café Ruiz, cada vez se acelera más el consumo y no interesa que el cliente permanezca tan solo charlando horas y horas sin consumir de forma continuada.